CONTENIDO Y REDACCIÓN
. Lenguaje claro y conciso.
. Cordial y respetuoso.
. Positivo, hablando de lo que podemos hacer.
. Describir las aptitudes y logros sin pedantería.
. No ser retórico.
. Emplear verbos de acción.
. No debemos repetir lo que ya aparece en el curriculum, sino remarcar aquellos aspectos que consideramos más destacables.
. Evitar un tono demasiado efusivo y coloquial.
. Evitar dar lástima.
. Redactar párrafos cortos y separados.
Así que ten claro que debes venderles la idea de que «te necesitan». Hazles valorar lo que tú puedes hacer por su empresa.